lunes, agosto 21, 2006

EL PRÓXIMO ORIENTE (Fernando Colomo) 6,5



Película tras película, Colomo demuestra sobre todo una cosa: que es un gran tipo.

Si por gran tipo definimos a alguien más preocupado por los demás que por sí mismo, Colomo lo es. Y lo es porque su discurso autoral ha pasado de la narración de los pensamientos, sentimientos y hechos propios (Tigres de papel) a la intromisión, entendimiento e integración en el mundo en el que vive. Es posible que en dicha transición de la primera a la tercera persona, su mensaje haya perdido frescura y sinceridad, pero desde luego, no ha perdido coherencia, oficio y benevolencia. Es el mismo Colomo el que se reía de sí mismo y de sus colegas en sus comienzos y el que ahora narra las vicisitudes de un escritor británico en un mundo ajeno o de un torpe carnicero en otro mundo ajeno. Es un Colomo que se descojona de todo al tiempo que lo ama todo. Que busca los defectos como fuente de virtudes. Que utiliza el humor como sátira y como modo de acercamiento. Que no se conforma con comprender al otro, sino que se une a él. Es el Colomo que es un gran tipo.

Un gran tipo que narra como los ángeles. Que estructura de maravilla y genera ritmo en la mezcla de conflictos. Es el Colomo que crea personajes amables y enternecedores a partir de torpes supervivientes convertidos en jetas. Es el Colomo que aprovecha cualquier reacción o cotidianeidad para convertirla en risa. Sólo deja de ser Colomo por causa ajena. Y es que en su afán de encontrar la emoción, encuentra verismo y argumento, potencia y drama, acción y reacción. Pero en su afán de encontrar las risas, encuentra guión y protagonista, pero le faltan secundarios comediantes, experiencia y vis cómica, alimento para la risa.

Así, el gran tipo encuentra lágrimas y sonrisas, pero no encuentra apenas risas y carcajadas. Ha ayudado a sanar las enfermedades para hacer un mundo mejor, pero más por la vía de la dinámica de grupo que de la risoterapia.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Al protagonista no lo conocía, pero se sale. No es muy guapo, pero actúa muy bien

Anónimo dijo...

Es una peli entretenida pero, a mi gusto, un poco infantil. Estoy de acuerdo con que el protagonista está bien.

Alberto Córdoba dijo...

La ola de Mundaka, de verdad ¿te parece infantil a ti o simplemente inocente?

Anónimo dijo...

A mi modo de ver aporta, bienintencionadamente eso sí, una visión demasiado optimista del Islam. Comentarios religiosos aparte, consigue hacer reír, que no es poco, y llega a convencer: Madrid es ya Londres. Mi valoración: 6