lunes, abril 26, 2010

CyJ: Primer visionado

Acabo de realizar mi primer visionado de la película con un amigo profesional. Y todavía tengo la carne de gallina.
Qué sensación más potente es no querer ver los defectos, qué maravilla es ver que no todos los ven, que algunos de los que se ven son corregibles, qué gozada es emocionarte, sentirte sobrecogido por algo que encima es tuyo.
Cada vez me apetece más llegar al final, llegar al principio.

viernes, abril 02, 2010

EL MAL AJENO (Oskar Santos): 7,5

http://www.youtube.com/watch?v=L_84Sisn_6k

No entiendo el desprecio crítico que ha vivido esta película. No es que pida su aprecio por ser ópera prima, lo pido porque es de las pocas películas que te ata a la butaca desde su lanzamiento hasta su desenlace.
Te ata a base de golpes. A base de inundarte con su óptica visual, con sus planos arrebatadores, con sus conflictos superpuestos, con su renovado lenguaje matemático. Puede que algunos de sus golpes tengan que ver con el carácter sobrenatural de la trama, admito que esos son golpes más o menos fáciles. Puede que otros sean efectos especiales sin máscaras ni tecnología, puedo admitir también su no extrema dificultad. Pero provengan de unos o de otros, lo importante es que arrebatan, que elevan la trama a miles de puntos en lo que ninguno carece de atractivo.
Como en el buen cine, cada escena tiene entidad en sí misma. Tiene un prólogo, tiene un nudo y tiene un desenlace. A nivel argumental y a nivel metafórico. Como en el buen cine, cada personaje tiene una personalidad, tiene una evolución. A nivel físico y a nivel psicológico. Como en el buen cine, cada personaje tiene un actor, tiene carisma. A nivel presencia y a nivel interacción.
Sumando ese guión y esos actores, aparece una realización que hace que cada escena brille sobre sí misma sin cegar a las demás. Es tan potente el uso de la cámara, es tan sobresaliente la fotografía que logra reinventar lugares tan conocidos como la clínica de La Paz o un parking carne de grisura. Y en la suma de la historia con la dirección y con la interpretación, se llega a una atmósfera, a un clímax donde lo sobrenatural deviene natural, donde lo irreal se cuela en el espacio de lo real hasta llegar a ser indistinguibles.
Donde el mal y el bien se encuentran para hacer una aleación, para llegar a hacer el bien ajeno practicando el mal propio, para realizar el mal encontrando el bien.