jueves, octubre 07, 2010

BURIED (Rodrigo Cortés): 7,5



Buried es la mejor película americana del otoño. Sólo que es española.
Esta anomalía, cifrada en las tildes que aparecen los títulos de crédito, marca la película. Y es que parece mentira que todo lo que ves y (sobre todo) oyes pueda ser obra de un grupito de españoles empeñados en contar una historia tan global como el conflicto EE.UU.-Irak.
Esta anomalía también se marca en la apuesta. Un americano había escrito el excelente guión, pero ningún americano se atrevió a producirlo. El motivo es claro: un solo escenario, un solo tiempo, un solo personaje. Hay tantas restricciones que sólo el presupuesto de gastos puede agradecerlas.
Y sin embargo, el de ingresos va a ser el principal beneficiado. Lo va a ser porque la intriga generada es bestial. Porque dichas restricciones se convierten en armas de concreción. Quizá la dirección no explota todas sus posibilidades claustrofóbicas, pero sin embargo, Cortés es capaz de convertir Buried en una peli de acción, en Indiana Jones y el Sarcófago de madera de pino. Logra generarte situaciones de alta tensión emocional, logra hacerte vivir persecuciones sin poder mover los pies.
Al final, queda una peli americana estupenda, coherente y emocionante hasta el final, cuyo doble truco final (sueño y canción) te impide quedarte con el regusto del buen cine. Te impide levantarte al día siguiente con el ataúd metido en tu cerebro.
Pero lo que ha quedado es una emoción sin límites, el éxito de una marcianada española que logró devenir americana.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estoy seguro que tan buena crítica se plasma en realidad cuando me enfrente a ella. Lo único que tengo claro es que en la ya celebre y famosa serie que D. Alfred realizó hace unos años, ya existía un principio de guión parecido. Lo que no comento es si el final es parecido.